Este es el jardín más grande y famoso de Suzhou, que abarca unos 52,000 metros cuadrados. Su diseño único, su belleza etérea y su perdurable significación cultural lo han proclamado Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO. Fue construido como residencia y jardín de un erudito de la dinastía Tang, y ha conservado la sensación de serenidad y refinamiento prevista por su propietario original.
El Museo de la Seda de Suzhou se construyo para mostrar la floreciente cultura de la seda china, desde sus inicios hasta la actualidad.